El G-14 plantea la primera batalla

Se avecinan tiempos de cambios y ampliaciones en el mundo del fútbol continental. Así se desprende tras la reunión que mantuvo ayer en Bruselas el G-14 que agrupa a los 18 clubs más poderosos e influyentes de toda Europa. La representación del FC Barcelona corrió a cargo del vicepresidente Ferran Soriano quien se mostró muy satisfecho por los acuerdos alcanzados y por la intención de todas las partes de llevar a cabo una serie de cambios profundos que vayan en favor de los intereses de los clubs.

La idea principal del G-14 no sería otra que la de crear una asociación independiente que agrupara hasta 40 ó 50 clubs con la finalidad de salvaguardar los derechos de cada entidad. Ahora mismo se entiende que estos no están bien defendidos por los organismos internacionales como la FIFA o la UEFA y se quiere dar un cambio de rumbo en la nueva etapa que se avecina. Se desea que estas modificaciones acaben teniendo influencia en el futuro sobre cada una de las competiciones que hay en liza.

Los responsables del G-14 se mostraban muy optimistas a la hora de valorar las conclusiones. Jean Michel Aulas, presidente del Olympique de Lyon y del G-14, aseguró tras la reunión que hacia finales del presente año podría encararse la recta final de este proyecto. “Hemos aprobado una serie de reglas que aumentarán el número de países que verán la posibilidad de unirse a nosotros. Intentaremos construir un futuro para los clubs y queremos que sus voces sean escuchadas y tengan repercusión”, apuntaba Aulas.

Thomas Kurth, el director general del poderoso G-14, también apuntó algunos detalles más sobre esta asociación que todavía no tendría nombre pero que durante el próximo mes de noviembre podría ser formalizada. “La idea principal no es otra que la de extendernos hacia unos territorios en los que todavía no estamos bien representados y poder llegar hasta los 40 o los 50 clubs. Estamos deseosos de integrar a los máximos clubs posibles y creemos que podemos hacerlo”, apuntó un altamente satisfecho Kurth que encabezó la reunión de ayer en Bruselas que, además del Barça, tuvo a representantes del Manchester United o el Milan AC.

La asociación de nueva creación sería similar a las ya creadas FIFPRO, que ejerce como el sindicato de jugadores profesionales, o la EPFL que representa a las diversas ligas europeas como la Premier inglesa, la Serie A italiana o la Liga de las Estrellas.

Uno de los ejes principales por los que se plantea la reforma es por los retoques que ha propuesto Michel Platini, presidente de la UEFA, y que quiere llevar a cabo con los campeones de Copa de cada país. Dicho organismo contempla la posibilidad de organizar una liguilla entre todos los campeones de Copa para posibilitar su acceso a la Champions League, máxima competición continental.

Una revolución con la que los clubs punteros están totalmente en contra y por la que piensan alzar la voz. No lo ven bien y aspiran a llegar hasta las últimas consecuencias para que así sea. “Estamos realmente preocupados sobre cómo puede afectar al nivel de la competición. Nos oponemos totalmente a dar una plaza en la Champions League a los vencedores de Copa. No vemos las razones por las que los vencedores de ese torneo deben tener acceso a la máxima competición continental”, explicó Thomas Kurth.

Lo que está claro es que se acercan tiempos de suculentos cambios y que la hegemonía de organismos hasta hoy tan poderosos como la UEFA o la FIFA podría tener los días contados.